• Habitantes de la zona, aseguran que ninguna autoridad les informó de la obra iniciada el año pasado.
• Advierten sobre el riesgo de graves daños al medio ambiente en la zona y temen por su patrimonio.

Epazoyucan,Hgo. Vecinos de la comunidad del Mercillero en el municipio de Epazoyucan, denunciaron públicamente la construcción ilegal de un relleno sanitario que presuntamente carece de los permisos de la Secretaria del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnath), del estado y la federación.
Preocupados por el enorme impacto ambiental, al subsuelo y los mantos acuíferos, que traería la operación de este relleno, pobladores de la zonas pide. La presencia de las autoridades.
Los afectados, señalaron que dicho tiradero (hasta hoy clandestino), se ubica en el municipio de Singuilucan exactamente en los límites con Epazoyucan en un amplio predio de aproximadamente dos hectáreas conocido como rancho San Cayetano.
Según los informes, desde diciembre del 2024 comenzaron los trabajos con maquinaria pesada para la perforación de las celdas y colocación de membrana.

La contaminación de los mantos acuíferos y la cercanía de zonas muy pobladas son algunas de las principales preocupaciones de los vecinos del lugar y aseguran que no fueron notificados del proyecto y el avance de la construcción es un grave problem social y al patrimonio de quiénes ahí viven.

Los inconformes recurrieron a las autoridades municipales, en este caso del municipio de Epazoyucan, jurisdicción a la que pertenecen y el alcalde Carlos Montaño Rodríguez se comprometió (durante una visita al lugar, hace más de dos semanas), a realizar el reporte a las instancias competentes ya que los encargados de la obra carecen de los permisos correspondientes para desarrollar el proyecto que ya está muy avanzado y poder parar la obra.
Desafortunadamente, confirman los afectados, hasta hoy no hay respuesta de ninguna autoridad y la construcción sigue su curso.
Ante la situación, las familias afectadas piden la intervención del gobernador del estado, Julio Menchaca Salazar para que tome cartas en el asunto y se frene el proyecto que causará grave daño ambiental en todos los sentidos y es que a tan solo unos dos kilómetros de distancia, se encuentra el pozo de agua que abastece del vital líquido a varias poblaciones de la zona, además de que el predio está asentado muy cerca de una barranca que sirve de cause natural para el agua pluvial que recorre varios kilómetros entre Singuilucan y Epazoyucan, lo que podría causar aún más daño al equilibrio natural de esta región con la llegada de miles de toneladas de basura.
Los pobladores adelantaron que de no tener respuesta de las autoridades competentes, se verán en la necesidad de tomar medidas más drásticas y consideraran el cierre de carreteras, ya que cuentan con el apoyo de habitantes de pueblos cercanos que se verían afectados y no permitirán que este ecocidio se concrete y dañe de forma irreversible el medio ambiente del lugar y la vida de las personas que ahí residen.