Hace mucho tiempo que los informes de las y los alcaldes hidalguenses no tienen la atención que existe hoy.

Además de ser el último de administraciones de cuatro años, los informes actuales son presentados en el contexto de la transformación.

Cómo sucede en estos casos, cada presidente municipal calificará su administración como la más importante, trabajadora y transparente de la historia pero, las revisiones a sus cuentas públicas serán la verdadera prueba del ácido.

Muchos de los ediles que se auto promueven van a ser citados por la autoridad judicial en unos meses , no tengo duda.

Decenas de ellos están bajo sospecha, ahí tenemos la lenta pero estridente investigación denominada estafa siniestra como ejemplo.

Esa estafa, desafortunadamente, no es la única duda que hay sobre manejos indebidos de los recursos públicos en las presidencias municipales durante los últimos años. Recordar que el gobierno del ex mandatario Omar Fayad fue laxo con sus secretarios en materia de comprobación y llegó un momento en que solo se acordaban de los alcaldes si querían autorizar la contratación de un fraccionamiento o inventar un “platillo típico”.

Municipios como Mixquiahuala, Tepeapulco, Mineral de La Reforma o Pachuca serán objeto de nuevas y exhaustivas auditorías; según los informes, hay elementos para creer que diversas anomalías administrativas fueron arrastradas desde hace 7 años o más.

Ya hubo una llamada de atención muy seria a los presidentes municipales que terminan su  gestión; desde la cima del gobierno llegó el mensaje, vía la Contraloría: cuiden muchos sus entregas, no dejen problemas como demandas laborales y sobre todo, no caigan en excesos como otorgar bonos de partida al personal o regidores; no habrá consideraciones para nadie.

@LasVocalesRadio