Los seis años de transformación en México generaron más cambios positivos para Hidalgo que décadas de neoliberalismo o gobiernos centro humanistas.

Solo con la edificación del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), que geográficamente no se encuentra en territorio hidalguense, los beneficios en infraestructura carretera y de comunicación son tangibles para nuestra entidad.

El anuncio sobre el inicio de la construcción del tren eléctrico, que correrá de Pachuca al AIFA y un plan de rescate hídrico en Tula significan miles de millones de pesos para mejorar las condiciones de vida de los hidalguenses.

El sábado pasado, el Presidente Constitucional y la Presidenta electa visitaron la zona de Tula para supervisar otro de los grandes proyectos transformadores: infraestructura de salud.

Acompañados del gobernador Julio Menchaca, ambos personajes confirmaron que la incorporación de los sistemas de salud locales al IMSS-Bienestar continuará en todo el país, trascenderá el sexenio y ampliará su cobertura.

La visita a Tula también sirvió para anunciar que habrá modificaciones en las instalaciones de Pemex y que existe un proyecto para utilizar (al fin), cientos de hectáreas donde nunca se construyó una refinería.

Cuando las polémicas se encienden en referencia a los recientes resultados electorales y muchos dicen que no se explican porque arrasó la 4T; basta revisar proyectos como estos que dan beneficio real y casi inmediato a Hidalgo, ahí tenemos muchas respuestas.

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